Asistentes inteligentes de voz 101: todo lo que necesitas saber
Todos hemos escuchado sobre los asistentes inteligentes de voz o asistentes virtuales.
Muchos los usamos activamente en nuestro día a día: nos ayudan a medir el tiempo en la cocina, a recordar pendientes en momentos o lugares determinados, o a poner nuestra música favorita sin presionar un solo botón.
Pero… incluso entre los asistentes de voz hay categorías.
No todos son igual de inteligentes.
En el siguiente artículo vamos a dar un recorrido por los temas principales que debemos conocer para realmente entender cómo funciona el universo de los asistentes inteligentes de voz.
Empezaremos por definir qué es y cómo funciona la inteligencia artificial conversacional (spoiler: no es magia, aunque lo parezca) antes de adentrarnos en el mundo de las redes neuronales artificiales, que imitan el cerebro humano para aprender. Después miraremos los distintos tipos de IA conversacional en el mercado actualmente: chatbots, asistentes de voz e IVR.
Para terminar abriremos la discusión a la pregunta del millón: ¿cuál es la diferencia entre un asistente virtual interactivo y un chatbot tradicional? Para averiguarlo profundizaremos en beneficios específicos y casos de uso concretos, tanto de la vida cotidiana como en operaciones empresariales.
Inteligencia Artificial Conversacional
La Inteligencia Artificial Conversacional es la aplicación del Machine Learning. Se usa para desarrollar aplicaciones basadas en el habla y el lenguaje que permiten a los humanos interactuar naturalmente con dispositivos, máquinas y computadoras que usan audio.
Piensa en la IA Conversacional como el “cerebro” que impulsa a un asistente virtual. Abarca una variedad de tecnologías que trabajan juntas para permitir una comunicación automatizada a través de la voz.
Esto le permite comprender la intención del cliente, descifrar el lenguaje, el contexto, y responder de manera similar a la humana.
Se utiliza la IA Conversacional cuando le pides a tu asistente virtual que te despierte por la mañana o cuando le preguntas la dirección para llegar a tu viaje. Uno habla con su voz normal, el dispositivo entiende, encuentra la mejor respuesta y responde con un tono natural.
¿Cómo funciona la IA Conversacional?
Para comprender cómo la inteligencia artificial puede traducir el lenguaje humano en algo que una máquina pueda entender para responder de manera similar a la humana es necesario visualizar el proceso.
A primera vista, es simple: una persona interactúa con un agente virtual y recibe una respuesta adecuada. Pero en realidad hay una serie de tecnologías diferentes trabajando detrás de cámaras para que esto suceda sin problemas.
El primer paso es el procesamiento del lenguaje natural (NLP por sus siglas en inglés: Natural Language Processing).
El trabajo del NLP es corregir la ortografía, identificar sinónimos, interpretar la gramática, reconocer el sentimiento y dividir una solicitud en palabras y oraciones que faciliten la comprensión del agente virtual.
Una vez que la solicitud se ha preparado utilizando NLP, se hacen cargo del resto una serie de modelos de Machine Learning y Deep Learning.
Conocidos colectivamente como comprensión del lenguaje natural (NLU, o Natural Language Understanding), estos modelos permiten que la IA conversacional identifique la intención o tema correcto de una solicitud y extraiga información importante que se puede usar para tomar acciones.
Ahora que la solicitud ha sido comprendida correctamente, es hora de formular una respuesta al usuario.
Al combinar la información recopilada mediante NLU con una jerarquía estructurada de flujos conversacionales, un agente virtual puede responder adecuadamente, ya sea respondiendo con una pregunta simple o completando una solicitud compleja.
Con el tiempo, a medida que el agente virtual responde más preguntas y los entrenadores de IA mejoran su conocimiento, la IA conversacional se vuelve cada vez más inteligente: aprende nuevas variaciones para cada intento y cómo mejorar sus respuestas.
